Agencias / MonitorSur, XALAPA, Veracruz .- La próxima vez que los ricos del mundo sean forzados a permanecer en confinamiento desearán hacerlo en una soleada y remota playa o en Nueva Zelanda, uno de los únicos países que han eliminado el Covid-19. Y están dispuestos a pagar por ese privilegio, desde luego.
Existe una oferta programas que garantizan la ciudadanía o residencia a cambio de inversiones en el país de destino utilizando firmas como Henley & Partners, la consultoría más grande dedicada a asuntos relativos a ciudadanía y residencia. Con la amenaza persistente de infecciones virales y confinamientos repentinos, la compañía está ayudando a quienes tienen suficiente dinero en sus bolsillos a comprar acceso a este tipo de paraísos.
Por ejemplo, usted puede comprar el derecho a vivir, trabajar y estudiar en Nueva Zelanda si cuenta con dinero para invertir entre 2 y 10 millones de dólares, dependiendo del tipo de visa de residente inversionista que elija. Con 1.4 millones de dólares y la compra de una propiedad se puede acceder a la ciudadanía para una pareja casada en Malta.
«Ahora se dan cuenta: establezcamos un plan de contingencia», dijo Dominic Volek, jefe de ventas de Henley, sobre sus potenciales clientes. «Por eso hemos visto un alza ahora, no solo en solicitudes de información sino en familias que están llevando el proceso».
Las solicitudes de información sobre el proceso se dispararon 49% en los primeros cuatro meses de este año, en comparación con el mismo periodo de 2019. Hubo un incremento de 22% en las personas que iniciaron un proceso para una nueva ciudadanía o derechos de residencia.
Los ricos no están solo interesados en las islas del Caribe en las que se pueden auto aislar mientras reposan en la arena. También están buscando un lugar en Australia o Nueva Zelanda, países que han impresionado al mundo con su manejo del covid-19.
Nadine Goldfoot, socia de la firma de abogados Fragomen, dijo que la pandemia ha forzado a los ricos a tomar acción. «Lo que ha cobrado importancia en el proceso de selección es cómo el país ha manejado la pandemia y cómo lo ha gestionado el gobierno», dijo.
Además, las personas ven este movimiento como una herramienta de gestión de su dinero tanto como una forma de viajar sin necesidad de una visa, dijo Henley. El interés en residencias por inversión en Portugal ha crecido en los meses recientes, atrayendo a clientes que esperan invertir en su estable mercado inmobiliario y tomar ventaja de su bajo conteo de casos de coronavirus.
Los más ricos del mundo no pueden escapar inmediatamente las cuarentenas o las prohibiciones de viajar. Recibir un segundo pasaporte o permiso de residencia toma tiempo, por lo menos tres meses para los programas del Caribe y mucho más para aquellos en la Unión Europea.
Aún así, mientras los negocios relacionados con la industria de los viajes sufre grandes daños, la firma Henley se está expandiendo. La compañía recientemente abrió una oficina en Nigeria y pronto abrirá otra en la India, en donde han aumentado los casos y las tensiones en la frontera con China han incrementado el número de personas que planean un potencial escape.
Dado que el virus y los confinamientos son «un riesgo con el que las personas tendrán que vivir por el momento, ellos (los ricos) quieren un lugar en donde la experiencia sea manejable», dijo Goldfoot.
Con información de la agencia ‘Notimex’.
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