Se encarece la canasta básica para el desayuno de los latinos en EEUU
Agencias, Ciudad de México.- La fuerte alza de los precios de los alimentos y los combustibles en América Latina impacta con más fuerza a los más pobres, creando un polvorín político que sirve de alerta a todo el mundo. De México a Brasil, la inflación en auge aumenta la brecha entre ricos y pobres en aquella que ya es la región más desigual del mundo.
Para la gran mayoría de los latinos que residen en la ciudad de Nueva York el dinero para hacer supermercado no les alcanza, el alto nivel de inflación ha subido los precios por las nubes y la canasta básica continua incrementándose de manera acelerada, pero las ayudas económicas para esto no necesariamente han ido en aumento al igual que los precios relacionados con la inflación ha dicho economistas expertos en la materia.
La tasa de inflación está en 8.52% en comparación con el 9.06 del mes pasado, aunque se puede percibir un ligero descenso en los precios del consumidor, esto no se ve traducido. La razón principal del descenso es la caída de los precios del petróleo, pero la comida continúa subiendo y los precios de productos comestibles aumentaron un 13.1%. Precios de alimentos perecederos como son la lecha, el pollo y otras carnes están en aumento significativo y el galón de leche tradicional ya cuesta $4 la unidad, según el Instituto Nacional de Estadística y Censos; La canasta familiar norteamericana se situaba en $753 dólares en julio.
El problema principal radica en lo siguiente, según las palabras del señor Enriquelme Cespedes, residente de Queens: “el problema radica en que mucha gente dice que aquí dan de todo y que las iglesias y centros de ancianos te dan de todo y que en otros sitios no dan; Pero no es verdad; Porque yo busco en tres y cuatro centros y ninguno me dan a mí (Arroz, aceite, habichuelas, carne o cosas tan elementales como papel de baño). En su mayoría de los sitios a los que uno va te dan una funda con productos enlatados y jugos que usualmente son desabridos” por ende esta ayuda a la que ellos afirman dar, se desperdicia mucho, porque muchas familias lo que hacen es que hacen cajas de comida para enviarla a sus países. Si lo que brindaran en los centros de acopio fuera cosas esenciales como el arroz, habichuela, aceite, sal, azúcar, vegetales, esta crisis alimenticia para nosotros los latinos al menos fuera mejor”. Esto afirma el Señor Enriquelme, al igual que Maria Herminia Alcántara, que afirmo que muchos latinos hacen por debajo del salario mínimo y por una u otra razón cuando aplican a los cupones de comida o no califican o le dan cantidades absurdas, por lo cual urge a las autoridades a tomar cartas en el asunto.
Antonio Pena, residente de Washington Heights, afirma que se siente sorprendido con la negligencia del gobierno federal porque las autoridades actúan como si ya el COVID-19 no existiera y como si la guerra en Ucrania tampoco nos afectara. Critica que no haya ayuda especial para atender a una población tan vulnerable; sin embargo, hay billones de dólares para alimentar una guerra, mientras la población estadounidense vive una pesadilla con la crisis de vivienda, comida y seguridad ciudadana.
Los derechos de inclusión, el gran tema de las elecciones del 2021: IEPC
Parlamento Juvenil 2019, espacio para el análisis y participación democrática
Candidato del PRI al Gobierno de Zacatecas y su esposa ocultan compra de residencias en Miami