Agencias/ MonitorSur, Porto Alegre.- Argentina y Lionel Messi respiran en la Copa América.
En otro partido cargado de sufrimiento, la Albiceleste se benefició de dos errores de Qatar en los goles de Lautaro Martínez y Sergio Agüero en cada tiempo para imponerse por 2-0 acceder a los cuartos de final.
No fue fácil al ir de más a menos ante uno de los dos invitados al torneo, otra vez sin un lucimiento colectivo. Pero se cumplió con la tarea de ganar y evitar el papelón de una eliminación en primera ronda.
“Necesitábamos una victoria para ganar confianza y tranquilidad”, dijo el capitán Messi. “Lo que más me gustó fue la actitud, las ganas de querer ganar el partido. Por momentos jugamos bien, creamos situaciones y tampoco sufrimos. Prácticamente no nos llegaron”.
De amanecer el domingo como última en el Grupo B, Argentina acabó segunda en la llave y se cruzará con Venezuela en el mítico estadio Maracaná de Río de Janeiro el viernes. Su suma de cuatro puntos le alcanzó para sacar el boleto como escolta de Colombia, que cerró una primera ronda perfecta al vencer 1-0 a Paraguay en Salvador.
Los argentinos se marchan de Porto Alegre con alivio, otra vez vivos tras quedar al borde del abismo en un gran torneo. Algo idéntico les ocurrió en el Mundial del año pasado tras vencer a Nigeria in extremis para superar la primera fase. Pero con la victoria evitaron así un ridículo que obliga a remontarse a la edición de 1983 del certamen continental.
Pero tendrán que levantar mucho su nivel para enfrentar a una rocosa Venezuela que le sacó un empate sin goles al anfitrión Brasil. La misma Venezuela que en marzo de este año le superó 3-1 en un amistoso.
“Venezuela es un equipo interesante, tiene las cosas claras, viene trabajando hace bastante tiempo. Un rival difícil”, lo analizó el técnico Lionel Scaloni.
“Me gustaría que el mensaje sea diferente en general, el balance es cuando se termina la copa no durante. Las críticas hay que aceptarlas pero estos chicos salen a jugar un partido de fútbol, pero parece una guerra. Con la presión que salen es complicado. El mensaje es que mientras se juegue la copa todos tiremos del mismo lado”, pidió el estratega de cara al próximo partido.
Mejor imposible se le presentó a Argentina la obligación de ganar sí o sí, con la complicidad de un fallo de bochorno del campeón de Asia. La ventaja llegó con el tanto de Martínez a los 4 minutos, definiendo con un zurdazo tras interceptar el balón en la frontal del área tras el defectuoso despeje del zaguero qatarí Bassam Alrawi.
“Ellos juegan bien por eso en la previa dijimos que es un gran equipo”, dijo Martínez. “Tratamos de presionarlos bien arriba y por suerte conseguimos un gol temprano. La presión está, teníamos que ganar para pasar de fase”.
Luego de errar en varias ocasiones, Agüero firmó su gol a los 82 con una muestra de coraje. Le robó el balón a Boualem Khoukhi, dio un giro para encarar y definió con un remate cruzado de derecha.
El técnico de Qatar Félix Sánchez admitió que la derrota obedeció a errores propios.
“Hemos pecado de inexperiencia”, dijo el entrenador español, apuntándole también al duelo que igualaron 2-2 con Paraguay, en el que remontaron un marcador adverso. “Hemos empezado dos partidos encajando goles en los primeros minutos en acciones totalmente innecesarias”.
El arranque en la Arena Gremio fue de dominio absoluto albiceleste, quizás su mejor rendimiento durante su travesía brasileña. Empujado más por el peso de sus individualidades, Argentina asfixió a Qatar y pudo aumentar el marcador con ocasiones desperdiciadas por Agüero y Nicolás Otamendi, los jugadores del Manchester City que tienen el pelo teñido de color platinado.
Pero el conjunto de Scaloni no pudo sostener la vitalidad inicial. A la larga, se fue quedando sin ideas y empezó a pasar zozobra con el repunte qatarí que acarició empatar mediante Almoez Abdulla y Hasan Alhaydos.
Argentina volvió a retocar su once titular, la constancia de la era Scaloni, a cargo del equipo desde la eliminación en octavos de final del Mundial el año pasado. Después del empate 1-1 ante Paraguay a mitad de semana, Scaloni formó un tridente de delanteros conformado por Messi, Agüero y Martínez. La mayor novedad fue el debut en el torneo del central Juan Foyth por Germán Pezella, mientras que Renzo Saravia relevó a Milton Casco en el lateral derecho.
Fue una apuesta más ofensiva al alinear a sendas líneas de tres atacantes y tres volantes de corte ofensivo, con Leandro Paredes, Giovani Lo Celso y Rodrigo De Paul.
En la reanudación, Scaloni buscó cambiar la dinámica con el ingreso de Marcos Acuña, un volante de contención, por Lo Celso a los 55.
El gol se le negó reiteradamente al “Kun” Agüero, primero al elevar una pelota que Messi le había acomodado y luego tras una providencial atajada del portero Saad Alsheeb.
Hablando de Messi, el astro del Barcelona tuvo un rendimiento discreto. Se perdió un gol hecho sobre los 70 al quedar ubicado solo en el corazón del área, mandando el balón a las nubes tras recibir de Acuña.
Al rato, otra modificación para tratar de liquidar un partido que se le planteaba demasiado tenso: Paulo Dybala debutó en la copa al sustituir a Martínez.
La tranquilidad finalmente llegó con el primer gol de Agüero en la copa.
Argentina fue local en Porto Alegre. El estadio fue copado por hinchas argentinos, la mayoría de los más de 40.000 presentes en un recinto que tiene capacidad para unos 60.540 espectadores.
“Sabíamos que acá íbamos a ser locales por la cercanía, esperábamos esto, Fue una locura. La gente nos banca y nos acompaña. Esa es la manera, ir de la mano todos juntos”, concluyó Messi.
Los derechos de inclusión, el gran tema de las elecciones del 2021: IEPC
Parlamento Juvenil 2019, espacio para el análisis y participación democrática
Candidato del PRI al Gobierno de Zacatecas y su esposa ocultan compra de residencias en Miami