(((Monitor Sur))) Lunes 29 de septiembre de 2014
Tuxtla Gutiérrez.- Las llantas delanteras de una unidad de transporte público conocido como Conejo Bus, quedaron enterradas en una calle donde se realizan obras de pavimentación desde hace seis meses.
De acuerdo con testimonios de los vecinos del Sector 5 de mayo, la obra está a cargo del ayuntamiento de la ciudad y ha generado malestar y quiebra de varios comercios.
Los pasajeros tuvieron que descender y abordar otra unidad, esto en la calle 13 oriente, entre avenida central y primera sur, en la parte trasera del Centro Cultural Jaime Sabines.
La unidad fue remolcada horas después. (MS) Foto: Gildardo Vázquez
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