Una forma sencilla de explorar esta innovación es mediante el desarrollo de materiales ferromagnéticos, utilizados en la construcción de dispositivos electrónicos. Manuel Herrera Zaldívar es parte del grupo de investigadores quienes exploran las propiedades ferromagnéticas de los semiconductores magnéticos diluidos (DMS, por sus siglas en inglés) en el Centro de Nanociencias y Nanotecnología (Cnyn) de la Universidad Nacional Autónoma de México, campus Ensenada. El equipo, cuenta también con talento de la Universidad de Texas y la Universidad Complutense de Madrid y pretende probar la eficacia de estos materiales en sistemas espintrónicos para desarrollar dispositivos innovadores.
De acuerdo con el Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt) y los investigadores mexicanos, los materiales ferromagnéticos son más eficientes a los transistores, puesto que estos últimos requieren constantes insumos de energía eléctrica solo para conservar la información grabada en ellos. En los productos magnetizados, los datos permanecen con mantenimiento mínimo, durante años.
Los investigadores se encargan de probar las propiedades ferromagnéticas de los DMS mediante técnicas de laboratorio. Carolina Bohórquez Martínez, egresada del Cnyn y parte del grupo científico mexicano, comentó en entrevista con Conacyt cómo se han usado los procesos de la microscopía de túnel y la catodoluminiscencia para medir tanto las características y orientación de los espines de los materiales como la reacción de elementos al intentar magnetizarlos y hacerlos útiles en el desarrollo de dispositivos.
Si los investigadores consiguen probar la funcionalidad de las propiedades ferromagnéticas de los DMS, podrán pasar a la siguiente fase de la espintrónica: la creación de una válvula de espín. A través del desarrollo de dichos dispositivos, se podrán generar aparatos más eficientes, con menos uso de energía y sean más poderosos. Los científicos mexicanos, afirmaron que la etapa donde se encuentran podría tener una duración de hasta 3 años más antes de pasar a una fase de tecnología aplicada.
