El Papa Francisco bautizó hoy a 33 bebés durante una celebración colectiva en la Capilla Sixtina del Vaticano y pidió a las madres presentes que los amamantasen cuando tuvieran hambre.
Entre los frescos de Miguel Ángel, joyas del Renacimiento, destacaron los llantos de los infantes, unos 20 niños y 13 niñas, entre ellas las gemelas Laura y Sara Inchingolo.
“Ustedes, mamás, dan a sus hijos la leche; incluso ahora, si tienen hambre o lloran, les pueden dar la leche. Agradezcamos al señor por el don de la leche y recemos por esas madres, que desgraciadamente son muchas, que no están en condiciones de dar de comer a sus hijos”, dijo el pontífice.
“Recemos y tratemos de ayudar a estas mamás. Entonces, lo que hace la leche para el cuerpo, la palabra de Dios lo hace para el espíritu: la palabra de Dios hace crecer la fe. Y gracias a la fe nosotros somos generados por Dios. Es lo que sucede en el bautismo”, agregó.
Cada año el Papa bautiza personalmente a varios bebés en el primer domingo posterior a la celebración de la Epifanía, el 6 de enero, en recuerdo del bautismo de Jesús.
En este caso Francisco tuvo un gesto particular ya que, el sábado por la tarde, bautizó a otros cinco niños, nietos de trabajadores del Vaticano, durante una ceremonia en la capilla de su residencia, la Casa Santa Marta.
Por otra parte, al mediodía de este domingo, el Papa pronunció una reflexión antes de bendecir con el rezo mariano del Angelus a una multitud congregada en la Plaza de San Pedro del Vaticano.
En su mensaje pidió a los católicos tener “valentía apostólica” para superar las “fáciles comodidades mundanas”.
Además pidió rezar por el éxito de su viaje apostólico a Sri Lanka y Filipinas, que comenzará este lunes por la tarde.
Los derechos de inclusión, el gran tema de las elecciones del 2021: IEPC
Parlamento Juvenil 2019, espacio para el análisis y participación democrática
Candidato del PRI al Gobierno de Zacatecas y su esposa ocultan compra de residencias en Miami