Los Cabos, BCS., /(Círculo Digital).- Los panistas Gustavo Madero y Javier Lozano se reconciliaron en el arranque de la reunión plenaria de la bancada de los senadores del Acción Nacional, después de la guerra de declaraciones entre los grupos calderonistas y de Madero.
La reconciliación, dijo Lozano, es porque así lo piden los panistas, que haya un partido fuerte, unido y cohesionado.

“Ya no voy a hablar del tema, se acabó, punto y aparte hasta nuevo aviso, porque espero que no vaya a haber  sorpresas”, dijo Lozano, quien aseguró que le va a bajar “no dos, sino muchas rayas” al nivel de sus declaraciones.

Lozano calificó de ser “un buen gesto” que Madero se haya acercado a saludarlo y confió en que se dé por concluido el proceso sancionador en su contra, que promovió Juan Molinar Horcasitas y que dio curso la Comisión Permanente del Consejo Nacional del PAN.

Madero dijo que las coincidencias entre los panistas son mucho mayores que las diferencias.

Señaló que siempre buscará y privilegiará el respeto a las diferencias y al trato de las personas que tengas diferencias, “pero siempre en el marco de la dignidad de las personas”.

Madero negó ser autoritario y trastocar la libertad de expresión de los senadores, pero resaltó que “se debe buscar que se cumpla con los reglamentos y estatutos del partido en todo momento”.

Dijo que no hay amargura en el PAN, sino “un gran entusiasmo, un gran ánimo, una gran alegría. El país está pasando por grandes dificultades y esto nos reclama a los panistas hacer una tarea muy responsable y cumplir con nuestro papel histórico”.

Hasta anoche estaba fuerte la confrontación. El PAN de Madero advirtió de un procesos de sanción contra Lozano por indisciplina, debido a sus declaraciones ofensivas.Lozana respondió que no lo iban a amedrentar y que no renunciaría al PAN.

Sin embargo, al inicio de la plenaria, ambos con un  apretón de manos, primero, y un abrazo, después, el dirigente nacional y el senador  hicieron las paces, por el momento, pues a decir de Lozano volverá a protestar cuando algo le parezca irregular.